Perdida en un vacío, solo recordando lo que solía vivir, alejándome de toda rutina que era parte de mi vida, pensamientos, conclusiones, cuestionamientos… Dejándome llevar por la sintonía de una vida perpleja guiada de dos márgenes que no veía en mi vida, que no solían frenarme. Llena de influencias vacías, colmada de situaciones innecesarias, enceguecida por mis propios ojos. Tratando de percibir un aroma, dentro de un rosedal lleno de espinas donde la necesidad de salir de allí podía hacerme invulnerable al sangrado de las heridas que me podrían causar…
Un sol, un camino, un hoy, un futuro sin pasado, una verdad. Y del otro lado UNA VIDA. Sin poder distinguir todavía esa sensación de ser uno mismo.
Pensar… en lo que queremos
Amar… a quienes nos aman
Odiar… a los que no perdonan
Extrañar… a los que no están
Reír… de verdad (no falsa ni sarcásticamente)
Llorar…cuando se llora de a dos
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